Penúltimo fin de semana antes del regreso a España y como no
podía ser de otra manera nos hemos ido a dar una vueltecita por Bali para
aliviar un poco el estrés que nos genera el día a día.
Como de curro andamos sobrados, teníamos que buscar algo que
nos hiciera desconectar y que mejor que pasar las horas tirados en la playa en
pleno mes de Diciembre. El viaje ha sido bastante tranquilito, no hemos
realizado ninguna excursión y lo único que hemos hecho has sido beber cervezas
en los típicos chiringuitos de Kuta, que vienen a ser unos oriundos con
neveras, los cuales te dejan unas sillas de plástico de esas de terraza de bar
y te sirven cerveza hasta que digas basta.
Entre cerveza y cerveza, un bañito y por fin un poco de
deporte, ya lo había intentado hace tiempo en la playa de Zarautz pero sin éxito
alguno, aunque me había quedado con las ganas de volver a intentarlo y estando
en una isla como Bali, es algo que no puedes dejar de hacer, así que, si, he
hecho surf y esta vez puedo decir que por fin lo he conseguido.
En el mismo chiringuito donde nos tomamos las cervezas
tienen un servicio de alquiler de tablas de surf y el mismo que te las alquila
te hecha una mano para aprender un poquito a coger una ola y poder ponerte en
pie encima de la tabla. En el primer intento, me fui todo valiente a coger las
olas yo solo, y claro ni una, no hacia
nada más que remar y ver como ola tras ola me tiraba de la tabla. Una vez que
conseguí mantener el equilibrio sobre la tabla, eso si tumbado, llame al chico
que nos alquilaba las tablas para que me diera unos consejos. Y claro, esto con
ayuda es mas fácil, una vez que te indica cuando tienes que empezar a remar
para coger la ola y te ves arrastrado por ella, entiendes todo un poco mejor y
cuando ves que la tabla coge velocidad, sientes que por fin la cosa marcha, en
ese momento empieza el siguiente paso, que es levantarse encima de la tabla.
En el primer intento la cosa no fue bien, solo faltaba, que
me hubiera levantado a la primera, pero la cosa pintaba bien, había cogido mi
primera ola y había intentado ponerme en pie sin éxito, a la segunda tendría que
ser, y así fue, con el asesor que tenia indicándome el momento de coger la ola,
solo tenia que concentrarme en ponerme en pie, así que en el momento que me vi
arrastrado por la ola y que entendí que la tabla estaba estable, puse mis manos
entre la cintura y el pecho, empuje la tabla para bajo y levante la parte del
tronco, en ese momento, lance mis pies hacia delante y con ímpetu me levante,
solo fueron unos segundos, tres o cuatro, pero en ese momento estaba encima de
la ola o de la espuma, pero que para un principiante en esto del surf es el
primer paso para poder hacer virguerías en el agua (no creo que llegue a tanto)
.
A partir de ese momento, el monitor improvisado se retiró y
empecé a coger olas yo solo, sin su ayuda, cogí varias olas mas y me levante
otras tantas veces, es verdad que todo con una tabla de principiante, que son
mas grandes y mas estables, pero el primer paso para llegar a ser un
profesional (JUAS JUAS JUAS JUAS) ya se ha dado.
El resto del tiempo en Bali, lo pasamos cenando y saliendo
un poquito de marcha, ya sabeís cervezas, copas, música y Ausies por todos los
lados. El fin de semana ha sido agotador, pero gratificante y por supuesto…
volveremos a Bali.
Besos y abrazos.
PD: Si no hay contratiempos este sábado estaré en Jakarta viendo a los Guns and Roses.
Actualización: Los contratiempos hicieron imposible que asistiéramos al concierto, por lo que no podre hacer una entrada al respecto, eso si, el sábado en Jakarta fue muy divertido, pero... lo que pasa en Jakarta, se queda en Jakarta :)
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